La reducción del desperdicio de alimentos debe ser la primera prioridad para garantizar una cadena de suministro de alimentos sostenible.
Las nuevas tecnologías están transformando nuestra forma de ver los residuos. Todos sabemos que la comida es demasiado valiosa para desperdiciarla y que la tecnología puede transformar la forma en que la preparamos. Al abordar el desperdicio de alimentos de manera agresiva y estratégica, todos podemos beneficiarnos de una cadena de suministro de alimentos más eficiente y robusta.
Todos los días, el mundo desperdicia aproximadamente un tercio de todos los alimentos que se cultivan en algún momento entre la granja y el tenedor. Esto equivale a más de $ 1 billón en desechos o más del 1 por ciento de la producción global. Cuando el mundo reflexione sobre cómo alimentar a la creciente población en los próximos 30 años, debemos comenzar por reducir este desperdicio.
Solo en los últimos 10 años hemos empezado a comprender realmente la magnitud de este problema. Ahora que apreciamos el nivel de desperdicio que existe en nuestro mundo, es hora de que pasemos de hablar sobre por qué el desperdicio es un problema para encontrar soluciones para enfrentarlo.
La buena noticia es que reducir el desperdicio de alimentos es beneficioso para todos en la cadena de suministro. En cada punto, existe la oportunidad de ser más eficientes o de encontrar nuevos puntos de venta de alimentos que de otra manera no se utilizarían.
- Los productores encuentran nuevos puntos de venta para vender productos que sus productores existentes no pueden o no quieren comprar.
- Los distribuidores de alimentos mejoran sus técnicas de previsión y compra u obtienen beneficios fiscales mediante la donación de alimentos a los necesitados.
- Los restaurantes producen los alimentos correctos y ponen el producto correcto frente a sus clientes.
- Los consumidores se vuelven más exigentes con respecto a lo que compran.
En todos los casos, ahorramos dinero al tiempo que disminuimos las necesidades de una agricultura más intensiva a medida que las demandas de alimentos continúan aumentando con las poblaciones en crecimiento.
Reducir el desperdicio de alimentos con innovaciones de otras industrias
Estamos en las etapas incipientes de innovación cuando se trata de reducir el desperdicio de alimentos, particularmente con la tecnología. Solo hay un puñado de compañías que intentan resolver este problema y, sin embargo, el tamaño de la oportunidad es enorme. Esto está destinado a cambiar.
A pesar de la magnitud del problema, este es un problema muy solucionable. Las primeras innovaciones para reducir el desperdicio, como la empresa Winnow, están demostrando que el desperdicio se puede reducir en más del 50 por ciento. Las soluciones están tomando paralelismos de otras empresas para resolver problemas similares y aplicarlos a este problema.
Estas soluciones se dividen en tres partes:
- Big Data: lo que se mide se mejora. Hoy en día, solo hay datos escasos sobre lo que se desperdicia. Registrar con precisión qué es un desperdicio y por qué, y luego usar esos datos para obtener información sobre cómo cambiar las prácticas operativas y el comportamiento de las personas tiene un poder tremendo. Una vez que sepas dónde se producen los desperdicios, el pronóstico mejorado y la planificación de la producción te permiten abordar el problema en su causa raíz.
- Nuevos mercados: claramente sabemos de antemano cuándo es probable que se desperdicie algo. Identificar a las compañías o personas que comprarán ese producto y lo utilizarán antes de su vencimiento es una nueva fuente de ingresos. Hoy en día, hay compañías que hacen esto en el nivel de la granja (Food Cowboys) y en los hogares ( Olio).
- Prolongación de las fechas de caducidad: una gran cantidad de nuevas soluciones están estudiando cómo podemos extender la vida útil de los productos y otros alimentos para asegurarnos de que puedan durar hasta que se consuman.
En Winnow se centran en el área de big data. Descubrieron que las cocinas simplemente no saben cuánto se desperdicia, y que muchas cocinas grandes desperdician el 20 por ciento de los alimentos que compran.
Esto no es por incompetencia, sino porque carecen de las herramientas correctas. Al monitorear el desperdicio con su tecnología, ayudan a los chefs a mejorar sus prácticas de cocina y lograr importantes ahorros.
La misión de esta empresa es la de ayudar a resolver el problema de los restaurantes a escala global. Ya tienen en seis países y están ahorrando millones a sus clientes. Sin embargo, solo están arañando la superficie del servicio que quieren ofrecer.
Hay tantas oportunidades para combatir el desperdicio en la cadena de suministro de alimentos y una enorme riqueza e impacto que se puede generar al hacerlo.
