Los viajes ya no son exclusividad de unos pocos, existen muchas y diversas posibilidades de planificar un viaje exclusivo y exótico, apto para todo los bolsillos.
Desde hace décadas venimos observando que el viajar es una actividad casi anual, y que no responde a barreras económicas.
La tecnología y la mejora en el trasporte terrestre, marítimo y aéreo, han contribuido a que los destinos lejanos, ya no lo sean tanto para cualquier individuo que busque sensaciones y conocimiento de culturas diferentes, en épocas vacacionales.
Hemos terminado ya el verano pero los destinos del otro lado del planeta siguen en efervescencia a lo largo de la estación otoñal, no en vano en algunos lugares del hemisferio contrario, la caída de la hoja se convierte en una florida e inestable estación primaveral llena de color y exotismo.
Destinos como en el cono sur americano atraen en nuestro invierno a los que buscan templar su estancia, o el lejano sureste asiático, son algo habitual en las reservas de semanas vacacionales, que aún con largas horas de vuelo, acercan al gran público, a lo vistoso, exótico y exclusivo de propuestas como las que nos ofrece Singapur, Filipinas, Brunei o el viaje a Tailandia
Ciudad, playa o montaña, todo es posible y en algunos casos hasta condensado y paquetizado en un elixir de experiencias que de una forma planificada e individualizada, ofrecen los especialistas de touroperadores o agencias del siglo XXI.
La digitalización del contenido y el acceso a la información que Internet nos ha brindado, puede unirse a la perfección con la labor de profesionales, que desde el plano del touroperador, pueden ofrecer al cliente final ese viaje exclusivo, transformándolo en una experiencia inolvidable como los que prepara para su clientes Grand Voyage.
¿Qué fue y que son ahora las Agencias de Viajes?
No han pasado ni 20 años de la entrada en el nuevo siglo, y esas oficinas comerciales de asesoramiento y tramitación de excelentes vacaciones, son un claro ejemplo de como ha evolucionado el sector turístico.
La tecnología, el acceso a la información y la digitalización del servicio, han contribuido a que la figura personal del asesor, se haya ido desplazando pr las inteligentes aplicaciones informáticas de los operadores turísticos o plataformas de tramitación, que hacen que cualquier individuo con ganas de viajar, pueda delante de un ordenador tramitar sus «paquetes» de forma ágil, rápida y sobre todo «económica».
¿pero realmente han desaparecido?, en la calle claro que no vemos tanto comercio de «viaje tal» o «viajes cuál», pero la labor personal del asesor se ha reconvertido. Una ruta, una planificación de un itinerario o una buena guía, son siempre elaboradas por personas, y del catálogo hemos pasado al blog, del consejo al testimonio en internet.
Aún existen en varias compañías esas figuras de intrépidos viajeros que detrás de un mostrador con ordenador enfrente eso si, siguen contribuyendo a hace de los viajes un entorno agradable en la tramitación, escuchando el consejo de quien antes lo hizo o realizó, buscando como adaptarlo de la mejor manera posible a su cliente.
La recurrencia y la fidelización no están reñidas con la tecnología, esta siempre será una herramienta, no un fin.
Eduardo Vigente tu post!!! opciones de viajes si que hay, pero debes hacer énfasis en que la calidad del servicio es la prioridad para el Viajero, en ese aspecto…. puedo comentar que soy sencillamente feliz cuando salgo de viaje con la coordinación y promociones que me ofrece mi partner de siempre Sildavia Viajes/a para mi… quizás una de las mejores agencias de viaje española…
Muchas gracias por tu apreciación Arturo, lo tendremos en cuenta para futuras escapadas…