La distribución dentro de las ciudades cada vez se hace más compleja, sobre todo si se pretende garantizar un servicio en los cascos históricos de muchas urbes.
Todo esto unido a factores como la ecología o la urgencia, hacen que las actuales formas de servicio sean cada vez más contaminantes y a la vez la recurrencia obliga a un encarecimiento de cada entrega.
Con todos estos factores, ha aparecido una iniciativa ya en fase de acreditación de las autoridades locales , en la ciudad Belga de «Brujas«, que nos ha sorprendido enormemente pero que a la vez es un claro ejemplo de ecología y sostenibilidad.
El proyecto avanza y pretende construir un sistema de tuberías especiales para transportar la cerveza a través de ella y así reducir el uso de camiones en la ciudad.
Al más puro estilo de una operadora de telecomunicaciones, quiere llegar con el polietileno hasta los grifos de cada «establecimiento».
La construcción de «cervezoducto» será soterrado y la ejecución será llevado a cabo por una de las cervecerías más antiguas de a ciudad para así aprovisionar a sus locales de la bebida alcohólica por excelencia en la capital de Flandes.
Las palabras del director de la cervecería, Xavier Vanneste, nos dan un alcance de los materiales y condiciones de la obra:
Las tuberías estarán fabricadas de polietileno: son más resistente que un conducto de acero. Así estamos seguros de que no hay fugas o extracciones ilegales.
La longitud estimada en esta primera fase es de 3 kilometros de tuberías que podrán trasportar cerca de 6.000 litros de cerveza por hora. Consiguiendo que se reduzca la circulación de vehiculos de transporte en el casco urbano de la ciudad en unos 500 camiones diarios con los consiguientes molestiasque provocan así como la reducción de emisiones de CO2.
Solo debemos esperar que avancen los meses del año para ver si realmente a finales del 2015 las autoridades locales ya han dado el visto bueno al proyecto y se convierte en una realidad perfectamente exportable a otras ciudades europeas.
