La red de ciudades se agrupa entorno a diferentes actividades creativas como la artesanía, el diseño, el cine, la Gastronomía, la literatura, la música y las artes audiovisuales.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, conocida generalmente por sus siglas, UNESCO, es la promotora de la Red de Ciudades Creativas del planeta, que actualmente agrupa a 69 miembros de 32 países.
La aportación española a la Red de Ciudades Creativas en Gastronomía
Desde este momento la gamba roja y el arroz a banda, pasan a formar parte de los símbolos culinarios que aportan tradición, sostenibilidad y sobre todo sabor y turismo.
Su búsqueda insistente de mejora de la salud a través de la alimentación les ha dado el pasaporte al selecto club de ciudades creativas, que desde aquellos lejanos años de la prehistoria ya se comenzaba a pensar en la gastronomía no solo como necesidad fisiológica, sino también como medio de socialización y placer, como seguramente nos lo demuestren los investigadores de los yacimientos de Atapuerca, que ya consolidan los estudios de energética experimental, en cuanto al consumo calórico en reposo y en actividad, que tenían los habitantes de la zona hace miles de años.
Así hasta nuestros días han llegado estas dos urbes que, demuestran como la cultura culinaria española es importante y sobre todo destacada en aspectos de producto y sobre todo nutrición.
Todo ello maridado con una excelente actividad creativa fruto del apasionante crecimiento profesional que ha desarrollado la actividad gastronómica de la mano de los mejores cocineros del planeta, que están aquí, en España
Ahora compartirán ese lujo con las ciudades de Popayán (Colombia), Cheng Du y Shunde (China), Ostersund (Suecia), Zahles (Líbano), KJeonju (Corea del Sur), Florianópolis (Brasil) y Tsuruoka (Japón).
De momento la actividad turística creativa en en materia gastronómica sólo acaba de comenzar, y veremos en próximas convocatorias de la Red de Ciudades Creativas de la UNESCO, si alguna otra ciudad española se une al selecto grupo elevando la cultura gastronómica ibérica y la Dieta Mediterránea a actividad de culto mundial.