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¿Es Bonito del Norte todo lo que consumimos?

Desde que este humilde servidor tiene uso de razón se ha apreciado el bonito y hasta en muchos casos confundido de forma intencionada o no con el atún, la melva, etc…
El precio, la calidad y hasta el caché del «norte» ha hecho que durante décadas haya sido un objeto de deseo en las mejores mesas de la geografía nacional.
En estos días, un estudio de un grupo de investigación de la Universidad CEU San Pablo, capitaneado por Esther Carrera, profesora del departamento de Ciencias Farmacéuticas y de la Salud, ha sacado a la luz un informe en el que se demuestra un «Fraude» en el ámbito de la comercialización de tan preciado pescado.
Vocablos que hasta ahora a los profanos de secano no nos sonaban de nada, empiezan a iluminar la agudeza comercial de los «listos» que han querido usar a la bacoreta, la melva, el rabil, o la sarda como bonito de norte.
Estas especies poseen un menor valor comercial, aunque en muchos casos los gustos de los consumidores puedan ir en contra de esta apreciación «económico-monetaria», y se han estado vendiendo con un etiquetado «confuso» o «engañoso» según como se mire.

El estudio 

Se basó en el análisis de las especies, con un método para su autentificación a través de la «inmunoenzimática». Técnica para la detección de anticuerpos que se puso en práctica en las especies tratadas para así detectar si se trataba o no de cada una de ellas.

Se llevó a cabo el análisis sobre 3 docenas de muestras de pescado, ya fueran frescas o congeladas que fueron comercializadas todas ellas como bonito del Norte.

El resultado

La muestra arrojó un dato estremecedor, ya que el 33% de los análisis dieron negativo, es decir no se correspondían con la especie etiquetada.
El resto, el 67%, debe ser analizado con detalle a través del ADN para saber si es realmente Bonito o no, ya que el rabil, comparte anticuerpos con el bonito y no deja clara su diferenciación por el análisis inicial.
Cabe destacar que todos los etiquetados fraudulentos se corresponden a las variedades congeladas del análisis.

La normativa

Desde el año 2000 la UE a través del reglamento 104/2000, prescribe y obliga a todos los productores de pescado a marcar de que especie se trata, su origen (el REAL), y su método de producción o extracción, para que los consumidores en la cadena comercial sepan exactamente lo que adquieren y no nos den congelado por fresco, de pincho por extractiva o  salvaje por piscifactoría…
Y en el caso que nos ocupa, «patudo» por «Bonito»
Esto demuestra que aún existen compañías y productores alimenticios que incumplen las normas para un beneficio económico, jugando en muchos casos con la salud de los consumidores, que aun siendo una materia prima apta para el consumo, existen muchos otros casos en los que podríamos estar ingiriendo algo no demasiado recomendable para nuestro organismo, pero ese será otro tema de debate en próximos posts…
Buena Pesca y recordad:

El Bonito del Norte es el «Rey» de los túnidos, diferenciándose por su sabor exquisito y su textura suave.
Son piezas de unos 6 a 10 kg y se pescan de forma selectiva y tradicional en las aguas del golfo de Bizkaia.

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