El cerdo ibérico es una especie animal única de nuestra península y sus productos adquieren una dimensión especial en el panorama gastronómico
Sus especiales características físicas, así como su hábitat, hacen de sus productos unos deliciosos y saludables manjares para el paladar.
La Dehesa es un paraje inigualable para que crezca y se alimente, forjando así un paraíso para su desarrollo convirtiendo poco a poco sus extremidades en los mejores jamones y paletas del mundo.
Este ecosistema es una de las piezas fundamentales para que los cerdos, alcancen la madurez necesaria antes de su sacrificio, andando en libertad por las dehesas.
De ella, obtienen la tan imprescindible bellota, que les otorgará no solo el apellido, sino también una carne especial con un alto grado de ácido oleico, muy nutritivo y saludable.
Jamón o Paletilla, ¿Cuál Elegir?
Del cerdo ibérico se extraen numerosas variedades de producto una vez sacrificado, desde su tocino, su carne, los lomos o costillas, pero los productos más demandados suelen ser sus patas traseras y delanteras, conocidas como jamones y paletillas respectivamente.
A la vista observamos claramente que el jamón es más voluminoso, suele ser más ancho y redondeado, así como más alargado, característica diferenciadora, conocida vulgarmente como más estilizado. Su peso ronda entre los 6 y 8 Kg
Por el contrario, las paletillas, son generalmente, más pequeñas, menos gruesas y más cortas, oscilando su peso entre los 4 y los 6 Kg.
La decisión de optar por uno u otro, generalmente viene definido por el rendimiento o por el precio, si bien las paletillas son más económicas, su rendimiento es menor al proporcionar menor cantidad de carne, frente a los jamones.
Si entramos en el parámetro del gusto o sabor, los jamones ofrecen una mayor riqueza en cuanto a matices en el sabor, al tratarse de una carne más veteada, por el contrario de la uniformidad e intensidad, que presenta la carne de las paletas.
A la hora de comprar Jamón de Bellota, atenderemos seguramente más a descubrir una experiencia diferencial, dependiendo del grado de infiltración de su carne.
Pero si queremos una verdadera intensidad de sabor, seguramente optemos por elegir una paleta ibérica de bellota
Cada uno entonces elegirá, en consecuencia, lo que mejor se adapte a su paladar y su presupuesto, ya que ambos productos son realmente excelentes.
¿Cómo comer y acompañar al jamón y a la paleta ibérica de bellota?
Ambos productos generalmente son consumidos de forma independiente y sobre todo “solos” o en compañía de unos crujientes picos de pan.
Pero existen muchas otras formas de disfrutar de su particular sabor acompañándolos de otros alimentos que ayudan a descubrir todos sus matices.
En el caso del Jamón, podemos consumirlo:
- En Ensalada haciendo una versión diferente de la capresse, dejando intacto el tomate y la mozzarella, pero cambiando la albahaca por rúcula y aportando unas lonchas de jamón ibérico de bellota.
- O como compañero de un montado de pan tostado con un pimiento verde frito.
En el caso de la Paleta Ibérica:
- En una Tosta de Pan untada con queso Roquefort, y coronándola con un par de finas lonchas de paletilla ibérica de bellota.
- O como ingrediente potenciador de sabor de unos huevos rotos con patatas, en forma de finas tiras, todo bien desordenado.
