España es un país de gastronomía, rica y muy variada.
La Semana Santa ha establecido, durante siglos, unas pautas de consumo en los alimentos que, aunque matizadas por una sociedad cada vez más laica, han dejado un poso y unas recetas que, hoy en día, son un atractivo más de los que ofrece nuestra tierra.
La cocina tradicional de Semana Santa se basaba en la observancia de la recomendación de no consumir carne el Viernes Santo, pero también en determinados días de la Cuaresma, por lo que las recetas más características se elaboran sin este componente.
En este artículo, vamos a facilitar cinco platos típicos de estas fechas.
Potaje de VigiliaLa Semana Santa es un periodo que aún puede coincidir con heladas y nieve en el interior del país, por lo que el potaje ha sido una buena opción, además de económica. Lo más habitual era prepararlo con verduras de la huerta, garbanzos, huevo rallado y bacalao, que aportaban las proteínas como sustitutivos de la carne, además de ser en el pasado un ingrediente más económico en su versión salada. Aunque presumiblemente de origen castellano, lo cierto es que su consumo ya estaba extendido en todo el país a mediados del siglo XIX.- Buñuelos de BacalaoComo se ha indicado, el bacalao era uno de los alimentos más consumidos durante estas fechas. El buñuelo de bacalao es de fácil preparación, pues tan solo requiere bacalao desmigado mezclado con otros ingredientes y posteriormente frito. Era popular en Madrid ya desde la segunda mitad del siglo XIX.
- TorrijasEn la cultura y tradiciones de la Semana Santa de Castilla, el dulce por antonomasia es la torrija, documentadas ya en el siglo XV. La base es el pan que se empapa en leche, se barniza con huevo y posteriormente se fríe. Su preparación era fácil y económica, y en el siglo pasado se hizo habitual en las tabernas castellanas durante esta época.
- Mona de PascuaEn Cataluña y otras regiones del norte de España y Levante el lunes de Pascua es festivo, y la tradición dice que los padrinos tienen que comprarle a su ahijado una mona, que originalmente consistía en un pastel con un huevo de chocolate, aunque es importante destacar que cada año los pasteleros elaboran preparaciones más complejas. La abundancia calórica de este alimento era la forma de señalar que el periodo de abstinencia que implicaba la Semana Santa había finalizado.
- PestiñosEl pestiño es el dulce más característico de la Semana Santa en Andalucía, y está emparentado con dulces parecidos originarios de Marruecos. Está documentado por vez primera en el siglo XVI, y consiste en una masa de harina que se fríe en aceite de oliva y, posteriormente, se recubre de miel.
