La forma de llegar al consumidor está a punto de dar un paso de gigante con las entregas a domicilio de la comida de los restaurantes.
La empresa líder mundial de comida a domicilio por Internet, la Danesa Just Eat, está a punto de comenzar en la ciudad Londres, un proyecto piloto para entregar la comida en el domicilio de los clientes repartiéndola con robots.
El ensayo se va a realizar en el centro de la ciudad de Londres donde los pedidos serán entregados por los robots auto-pilotados de la compañía Starship, capaces de llegar hasta la puerta de la casa de los clientes.
La startup Estonia, Starship Technologies ha llegado a un acuerdo de colaboración con Juste Eat, para que las entregas de la comida pueda realizarse de forma autónoma y en un plazo máximo de 30 minutos.
Fruto de las pruebas y ensayos que se llevan realizando desde hace meses en las calles de de Londres, Berlín, Tallín y Estonia, con cierto éxito, aparece ahora la puesta en escena real de un servicio que requiere efectividad y sobre todo rapidez.
Just Eat ha acordado con Starship el despliegue de una flota de 6 repartidores robots, que son capaces de cruzar la carretera por sí solos, de esquivar obstáculos y sobeo todo llegar a destino.
La idea de la compañía no va de momento en la línea de la sustitución del personal de reparto sino de una mejora en la eficiencia y sobre de apoyo en las horas puntas de servicio, cuando los restaurantes están desbordados de pedidos.
Un robot repartidor de comida a domicilio
Los robots, miden aproximadamente 60 cm y tienen un peso inferior los 20kg , y vienen dotados de 6 ruedas de tracción, antenas y cámaras de 360º.
No son 100% autónomos, ya que están constantemente monitorizados por el equipo de Starship desde las oficinas de Tallín y Londres y, en el caso de que se encontraran con algún obstáculo en la carretera como una papelera en el suelo, un vehículo sobre la acera o cualquier objeto sobre la misma, podrán ser redirigidos a distancia.
Surge la duda de quien lo recibirá y si será el destinatario real, pero ya está todo desarrollado y los robots sólo podrán ser desbloqueados y así poder abrir su cubeta contenedora, mediante un código de acceso, que los clientes recibirán junto con el pedido en el terminal con el que lo realizaron.
La eficiencia en el servicio, se completa con la comunicación del la entrega en los momentos previos, cuando el robot esté a dos minutos del punto de destino, enviará al Smartphone del usuario una primera notificación de que está en camino, y en un segundo momento cuando llegue a la dirección exacta, realizara la segunda comunicación de llegada.
¿Lo veremos pronto por las calles de las ciudades españolas?…