La gastronomía de nuestro país es diversa, variada y realmente excelente sea cual sea la elaboración culinaria, hoy destacamos los platos y costumbres más interesantes en el invierno.
Ahora que ha llegado el frío para quedarse es un buen momento para recordar o descubrir la cocina española de invierno. Platos de cuchara, productos de matanza y fruta de invierno. Nuestra tradición culinaria está llena de grandes ejemplos relativos a cómo la cocina define nuestra identidad cultural.
Vayamos, pues, a dar un paseo por las diferentes regiones de la geografía española y descubramos la gastronomía de cada lugar. Un tesoro de grandes dimensiones que tenemos el inmenso privilegio de disfrutar en España.
Gastronomía Berciana
El Bierzo es una bella comarca del norte de León que celebra, en los meses de invierno, la matanza del cerdo.
El plato que define la identidad de los lugareños es, sin lugar a dudas, el botillo. Esta rotunda exquisitez, que se sirve con patatas y verdura cocida, es perfecta para los días de frío.
Eso sí, si decides cocinarlo en casa, te recomendamos que lo hagas en festivo, ya que hay cocerlo en perfectas condiciones (sin que se rompa) y esto puede llevarte muchas horas…
Nunca olvides maridarlo con alguno de los excelentes vinos de su Denominación de Origen «Bierzo», reconocidos y galardonados internacionalmente por los más prestigiosos enólogos y críticos.
Gastronomía Navarra
Con una buena parte de su territorio a las faldas del Pirineo, paraíso de la caza, y otra al sur regada con las aguas del Ebro, fuente inagotable de regadío para su huerta, podemos encontrar un amplísimo y variado elenco de platos y guisos, ideales para degustarlos en los meses de invierno.
Los platos con caza y legumbres de cultivo local como las alubias con perdiz o los ya atemporales pimientos del piquillo rellenos de bacalo, que a partir del pescado desalado y desmigado, son un acompañante perfecto a la fina bechamel que rellena los rojos benjamines de pimiento local.
Una variedad perfecta, que también se elaboran con diferentes rellenos, ya sea de carnes de sus excelentes ganaderías u otros pescados y mariscos como la merluza y las gambas. Su cercanía al cantábrico es una gran ventaja para contar con estos ricos alimentos marinos.
Gastronomía Castellana
El interior cuenta con inviernos ásperos y tal es el caso de la región de Castilla-La Mancha donde sus habitantes son expertos en platos de cuchara cargados de energía, para afrontar los rigores de la gélida estación fría.
Te recomendamos probar el atascaburras, también conocido como ajo mortero o ajo arriero.
Se trata de una deliciosa crema de patatas, ajo y bacalao que resucita a los muertos y que pone en valor la tradición culinaria de los antiguos pastores de las comarcas castellanas.
Si se acompaña con alguno de los caldos de las denominaciones de origen castellanas, ya sea Valdepeñas, La Mancha o de los del Norte como los de Ribera del Duero, la experiencia es digna de repetir.
Gastronomía Catalana
Cruzamos ahora del centro de la península al este. Hemos llegado a la cara norte de la zona mediterránea y allí prácticamente en cualquier región, pero, sobre todo, en el interior, no hay plato más celebrado que la calçotada.
Los calçots son unas cebollas tiernas originales de la provincia de Lérida.
La tradición manda y, a finales de invierno, se celebran las populares calçotadas, reuniones amenas y divertidas para juntarse con los amigos alrededor de un buen fuego de sarmientos.
No puede faltar el vino de la tierra, las butifarras y, para acompañar la verdura, la salsa romesco.
Gastronomía Levantina
Vamos a seguir nuestro camino por la gastronomía española bajando por las costas mediterráneas. A los populares arroces y paellas valencianas perfectos para cualquier época del año, podemos sumar los platos de cuchara. Por ejemplo, el popular guiso con pelotas. amasados de miga de pan, huevo y el relleno que más te guste. Es muy reconfortante y sabroso, además de popular en muchas regiones del sur.
Así llegando a tierras Murcianas, nos encontramos con un plato de lo más popular en invierno, el conocido como guiso de trigo, cargado de legumbres y cereales, ideales para combatir las bajas temperaturas.
En Baleares, también encontramos platos contundentes para invierno. La caldereta de langosta menorquina es un buen ejemplo.
Gastronomía Andaluza
En el sur aparte de buen tiempo también hay buena cocina, y a veces hasta invierno.
Al ser una región tan grande y con tantas influencias foráneas a través de la Historia, podemos encontrar un sinfín de platos para combatir el frío, en tierras altas sobre todo como las sierras de Huelva, donde la matanza cobra especial influencia.
Para entrar en calor, nada mejor que una sopa, así que atrévete con el gazpachuelo. Es un plato muy popular en Málaga, típico de pescadores. El ingrediente principal es el pescado blanco, acompañado de patatas y una salsa blanca hecha de yema de huevos, ajo y aceite de oliva.
Las frituras, son también un excelente exponente de una buena comida caliente que en invierno tomamos techado y en verano al aire libre.
Podríamos seguir hablando de platos tradicionales del invierno español hasta el infinito. La enorme variedad de materia prima de calidad y herencia cultural adoptada a través de los siglos hacen de nuestro país un tesoro de la gastronomía mundial de primer orden.
