Cada vez es más común que las personas descubran que tienen intolerancias alimentarias.
Hoy en día se le da más importancia a la nutrición y a nuestra salud, dejando de lado los mitos alimentarios de antaño y cambiando nuestra forma de alimentarnos, escuchando a nuestro cuerpo y detectando lo que no nos hace bien.
En los últimos años se ha visto un aumento en las personas intolerantes a la lactosa, fructosa, gluten y más, ya que disponemos de más herramientas para detectarlo.
Una intolerancia alimentaria sucede cuando nuestro organismo no es capaz de procesar correctamente un determinado alimento.
En la mayoría de los casos, los síntomas suelen ser leves y por ello muchas personas conviven con la intolerancia sin saberlo. Pero sin dudas, descubrir si tienes una intolerancia alimentaria puede ayudar enormemente a mejorar tu salud y bienestar general.
Las intolerancias más comunes
Para reconocer si sufres de alguna intolerancia alimentaria, lo primero que debes hacer es escuchar a tu cuerpo y ser más consciente de tu alimentación. Si varias veces te ha pasado de sentirte hinchado, con problemas estomacales o dolores luego de comer, entonces puede que padezcas alguna de las intolerancias más comunes, que son:
- Intolerancia lactosa.
- Intolerancia fructosa.
- Intolerancia al gluten.
- Intolerancia sacarosa.
En el caso de que sospeches tener una intolerancia, lo mejor es controlar bien lo que comes. Una forma muy sencilla de hacerlo es llevando un diario de comidas, en donde anotarás todo lo que consumes y podrás detectar si te sientes mal luego de comer determinado alimento.
Si por ejemplo, te sientes mal luego de comer dulces, puede que seas intolerante a la fructosa y lo mejor será hacer una prueba: elimina ese alimento por unos días y verifica si te sientes mejor.
Pero muchas veces es difícil detectar estas intolerancias en alimentos preparados fuera de casa o ultraprocesados. Por lo que si el malestar sigue y no puedes encontrar la causa, seguramente lo mejor será que visites un endocrino, que te hará una analítica de sangre específica para determinar si tienes intolerancias.
Intolerancia vs. Alergia: cómo diferenciarlas
Es importante saber diferenciar entre intolerancia o alergia, ya que los síntomas y consecuencias para el cuerpo no son los mismos. Si bien la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) estima que sólo el 2% de los adultos es alérgico a algún alimento en particular, las consecuencias de una alergia pueden ser muy graves.
En el caso de la intolerancia alimentaria, siendo la más común la intolerancia a la lactosa o al gluten, suele provocar problemas digestivos como inflamación, dolor o diarrea, pero también pueden generar otras reacciones como: dolor de cabeza o acné.
A diferencia de una intolerancia, una alergia es cuando el cuerpo entra en contacto con un elemento que considera una amenaza, y se desencadena la producción de anticuerpos con una serie de síntomas.
- En este caso, los síntomas son algo distintos, ya que los más comunes son: dermatitis, hinchazón en labios y párpados, enrojecimiento de la piel, rinitis, problemas para respirar, asma y problemas estomacales.
- En casos de alergias graves, el consumo de este alimento puede llevar a un shock anafiláctico que puede ser mortal.
Y por ello es esencial diferenciar entre intolerancia y alergia, porque también varía su tratamiento. Si sufres de una intolerancia alimentaria, bastará con evitar este componente lo máximo posible, ya que puede que pequeñas cantidades no tengan un efecto negativo.
Pero en el caso de las alergias, lo recomendado es eliminar completamente ese alimento y evitar incluso el contacto físico si la alergia es demasiado grave.
